Hoy te hablo sobre un recurso, que ha sido el secreto detrás del éxito de grandes líderes, como Bill Gates, Steve Jobs, Bob Iger y Arnold Schwarzenegger, para alcanzar el rendimiento y productividad máximos en sus respectivas áreas. ¡El Flow!
En el campo deportivo, esta práctica mental de mayor consciencia es constantemente asociada a los medallistas olímpicos. También empresas y universidades han logrado impresionantes beneficios, implementando estrategias de flow. Observa los siguientes indicadores del proyecto The Flow Genoma (liderado por el director ejecutivo Jamie Wheal, especialista en Peak Performance y Liderazgo):
- Un estudio de 10 años de McKinsey encontró que los altos ejecutivos incrementan en 500% su productividad cuando están en estado de flow.
- Google también ha reportado beneficios significativos en la productividad y enfoque de sus colaboradores, mientras se encuentran en este estado; con un aumento del 70%.
- La Universidad de Sydney informó que hubo 430% de incremento en la creatividad y resolución de problemas.
- Muchas otras empresas han reportado, como parte del proyecto, mejoras en la satisfacción personal.
Lo que llama la atención es que, siendo algo tan beneficioso, aún es un tema que pocos conocen en profundidad; así que vamos a explorarlo:
Comprendiendo el Flow y el impacto en nuestra mente:
¿Alguna vez te has encontrado totalmente inmerso en una actividad, sin darte cuenta del tiempo que ha pasado?
Ese estado de consciencia es conocido como "flow" o, en palabras aún más sencillas, significa fluir con aquello que tienes frente a ti... como un acto de "rendirse" a lo que realizas en ese momento.
El resultado de tamaña concentración y enfoque hace que puedas ejecutar la actividad usando todas tus capacidades y fortalezas, dejándote con la sensación de satisfacción plena.
Al entrar en este estado de “fluidez”, muchas cosas pasan a nivel neurológico: se incrementan los niveles de dopamina y disminuye el cortisol. Se activa tu zona genius en la corteza prefrontal, ayudándote a resolver problemas y tomar mejores decisiones con mayor facilidad. Por si fuera poco, también te desactiva una red cerebral llamada DMN (Default Mode Network), que está relacionada a las distracciones, y activa la corteza cingulada (que te ayuda a tener mayor enfoque).
Ya podrás imaginar las consecuencias positivas de todo eso: al estar muy concentrados, enfocados, operando en la zona de genialidad, con los sensores de gratificación y recompensa activados y sin tanto estrés, se logra más productividad y disfrute del proceso.
Flow es sin duda, un poderoso recurso no explotado, que podemos aprender a manejar como ejecutivos, para tener una vida más tranquila y obtener resultados aún más efectivos.
¿Cómo lo activamos?
La ciencia apunta seis elementos como fundamentales para el estado de fluidez; y acá te los explicó en detalle:
El primero a considerar es que ese estado de concentración plena, llega a partir de una combinación perfecta entre actividades que te desafíen y te permiten percibir que aprendes; al mismo tiempo que te aumentan tu confiabilidad y la seguridad que cuentas con las habilidades para manejar dichos desafíos.
La gráfica a continuación te puede dar una idea más clara; si el desafío es máximo lo que te genera es estrés, ansiedad, preocupación, etc. Por otro lado, si tus habilidades son muy grandes, puedes relajarte demasiado o hasta aburrirte. Es en el balance que logras fluir; cuando sabes que puedes ejecutar lo que tienes frente a ti y, aun así, requiere de tu esfuerzo.
Si piensas en los deportistas o un artista, queda fácil comprenderlo. Antes de iniciar la carrera, o pintar el canvas, ellos pueden sentirse confiados; pero, al mismo tiempo, saben que es en la ejecución (técnica, atención, etc.) que se darán los resultados.
Con esos elementos, podrás lograr estados de mayor consciencia y concentración.
Nota que, en lugar de pensar en rendimiento y desempeño óptimo como una cuestión de velocidad y cantidad de acción, el estado de flow se trata de precisión y enfoque; de tomar el tiempo para ralentizar y enfocarse en cada acción, lo que permite alcanzar logros aún mayores.
La gran paradoja es que haciendo menos… logras más.
"Time slows down. Self vanishes. Action and Awareness merge. Welcome to flow”.
- Steven Kotler
Te invitó a que lo intentes:
¡Que tus días sean de mucha fluidez!